Parece que ese anhelado descanso no llega más. ¡Y ni hablar del dinero! Muchas veces relegamos los viajes porque las cuentas no cierran nunca. Te dejamos algunos consejos útiles para que los números te acompañen en tus próximas vacaciones.
Todos soñamos con unas vacaciones en la playa para descansar del mundo de la oficina y las obligaciones. Luego escuchas que tu compañero de escritorio se fue al Caribe. Y Marta, la de las fotocopias, se fue a conocer Paris. ¿Cómo lo hacen?
Hay maneras de planificar tus vacaciones sin caer en la bancarrota. Suena imposible, pero no tomes conclusiones apresuradas. Te contamos algunas maneras de llegar a ese destino que tanto soñaste.
No hay tiempo que perder. Toma el control de tu presupuesto ahora. Con una mano en el corazón, piensa cuanto puedes ahorrar por mes. Todo suma. Capaz en tres meses tengas esa comisión extra que ayude a completar tus ahorros. Planifica los gastos posibles según el destino que elijas y poco a poco suma el monto.
¡No tienes que hacerlo sólo! Si estás en pareja, puedes acordar que los dos ahorren un porcentaje de sus ganancias para poder realizar el viaje de sus sueños. Si tienen sueldos muy dispares, no hay problema. Depositen un mismo porcentaje a un pozo común que luego utilizarán para cubrir los gastos de alojamiento, pasajes, comida, etc.
Si estás sólo, considera recurrir a un crédito. Hay algunos créditos con una tasa mínima de interés. Primero planifica si puedes pagarlo. Una vez que cerraron las cuentas, anímate. Muchas veces un crédito es el empujoncito justo que necesitamos para poder darnos el gusto de viajar a esa ciudad que tanto queremos conocer.
El último paso es no dejar de soñar. Si bien es importante que mantengamos los pies sobre la tierra, tenemos que seguir soñando y visualizando nuestros deseos. Tarde o temprano se cumplirán.